Después de un verano tan excepcionalmente cálido y un otoño con temperaturas veraniegas hasta mediados de noviembre, por fin bajan los termómetros y se puede pajarear de manera más agradable y con la posibilidad de ver especies que hasta ahora y por no acabar de llegar el frío, aún no podíamos disfrutar.

En el Delta del Llobregat hasta que no entra bien el frío y se asientan las aves que vienen de invernada procedentes de otros países de Europa, las lagunas están bastante escasas de anátidas. A falta de anátidas por suerte podemos disfrutar de una interesante variedad de pajaritos como mosquiteros comunes, tarabillas europeas, lavanderas blancas, petirrojos europeos o bisbitas pratenses y alpinos. También puede aparecer un pajarito excepcional que es el Ruiseñor pechiazul, que en esta época está en paso; el Aguilucho lagunero suele estar presente, se pueden ver además de las primeras anátidas las avefrías europeas y los cormoranes grandes y en este paseo, aunque no suele ser habitual incluso han aparecido una bandada numerosa de correlimos comunes, pertenecientes a la familia de las limícolas.


Correlimos común con plumaje de invierno

Con la llegada del frío la luz mejora considerablemente, lo cual nos permite apreciar con mucho más detalle la textura y los colores de las aves.


Azor común sobrevolando la marisma

Aunque no siempre es habitual su presencia, de vez en cuando puede aparecer algún ejemplar y en ocasiones hasta se los ha visto cazando presas.


Ruiseñor pechiazul de la subespecie svecica. Ejemplar de primer invierno

No siempre hay suerte de poder observar y menos fotografiar al Ruiseñor pechiazul, ya que no es muy confiado. Además al verlo nunca es evidente su colorido corporal y por encima solo vemos un pajarito de color oscuro. Por eso siempre será necesario observarlo con los prismáticos para identificarlo con seguridad. El único aspecto que nos puede ayudar en vuelo es la parte de cola rojiza que destaca en ocasiones. Los ejemplares de primer invierno son los que han nacido en la primavera-verano precedente.


Cormorán grande

Hay dos tipos de cormoranes, el grande y el moñudo. En los humedales de la costa y del interior peninsular suele habitar el Cormorán grande. El Cormorán moñudo es estrictamente costero o marino. Suele ser bastante fácil diferenciarlos unos de otros, por su tamaño y por el colorido del pico.

Aguilucho lagunero hembra

Es la rapaz más común en las lagunas. La mayoría de ejemplares que se observan en el Delta del Llobregat son hembras. Es común verlas acechar a las anátidas y ocasionar revuelos entre ellas, aunque también resulta muy difícil verlas cazar una presa.


Bisbita pratense bastante camuflado

Las dos especies de bisbitas más comunes en este humedal son el pratense y el alpino, sobre todo éste último. El Bisbita pratense es un pajarito invernante que abunda más en el campo; se le suele ver en el suelo terroso de los campos arados, de manera que aprovecha su colorido pardo-grisáceo como camuflaje.


Tarabilla europea macho de espaldas

Vista en esta pose de espaldas hasta costaría identificarla, ya que de cara su cuerpo anaranjado intenso en el macho es lo más destacable. También es verdad que esta foto hecha un poco a contraluz tampoco facilita la identificación.


Mosquitero común alimentándose de los pulgones que hay en el envés de las hojas

En esta época se suelen ver concentraciones de mosquiteros comunes, muchos de los cuáles invernantes. Se mueven por los árboles con mucha rapidez buscando alimento. De las diferentes especies de mosquiteros que se pueden ver en la península éste es el más común.

El mismo ejemplar de mosquitero en reposo